Uno de esos días...

Hoy es uno de esos días... Uno de esos días en los que no me soporto, en los que ni yo mismo puedo conmigo mismo. Trato de analizar mi comportamiento ante determinadas situaciones, al igual que mi carácter en general, y siempre llego a la misma simple conclusión: ¿cómo soy? es más... ¿quién soy?
¿Qué me gusta? Ni yo mismo lo sé.
Voy por la vida con aires de fortaleza, de que me las sé todas, de que sé lo que quiero, de que poseo la suficiente madurez y seguridad para tomar decisiones y ser consecuente con ellas... Si soy sincero, me echo de menos. Echo de menos todas las cosas que pensaba que era y ya no soy. Mi impulsividad, mi cuerda locura, mi ingenuidad, mi decisión, mi timidez... ¿Qué queda? ¿Qué se ha ido?
Todo cambió. Hubo un antes y un después, y tú fuiste el punto de inflexión. Me lo robaste todo. Como si de un espejo se tratara, te lancé todo mi amor que, al chochar contra el cristal, volvió a mí convertido en tu desgana, en tu poca fe, en tu tristeza, en tus miedos, en tus complejos... y ahora es todo lo que soy.
Prometí no darte ni una sola letra más aquí dentro, pero ya no cumplo ni mis promesas.
No sé si te echo de menos, no sé si es porque hoy es domingo, no sé cuál será el motivo, pero hoy es uno de esos días para olvidar. No me reconozco, no soy capaz de ver más allá de todo lo que aparentemente soy.
¿Qué motivos para quererme puede tener alguien si soy lo más parecido a un muerto viviente? Hueco y vacío. Así me dejaste, así me he quedado. Y ya llega un punto en el que no soporto mi palabrería, no soporto mi forma de ser, mi manera de pensar algo y decir lo contrario simplemente por incordiar a la otra persona. ¿Principios de infelicidad?
Últimamente no son sino puertas cerradas, "no's" rotundos... ni ventanas abiertas, ni lucecitas de esperanza, ni nada. Cerrado, apagado, sin luz, sin aire... Así está todo. Es triste ser dependiente de alguien, no poder bastarte de ti mismo para sentirte bien. No sé si podrá considerarse enfermedad, pero creo que empieza a ser contajioso.
La vela se ha ido consumiendo, y ya no queda más que el humo de lo que mi vida solía ser, de la relación que me unía a mis seres queridos. Y hoy ninguno ha dado señales de vida, ¿será que me lo merezco?
Hoy es uno de esos días en los que cualquier cosa dicha o hecha en mi contra podría aplastarme con facilidad. Fragilidad, inestabilidad, inseguridad... hoy es domingo, sin duda.
Hoy no quiero pensar, y parece que todos los días me veo obligado a ello. Muchos indivisuos se empeñan en centrar sus energías y sus pensamientos en los conflictos del mundo y te miran mal si no los conoces, si no sabes de qué van, o si no te interesan. Pero ¿cómo puedo interesarme por más conflictos? Con los míos tengo más que suficiente.
Hoy todo me molesta, nada es bonito, todo son intereses, falsedad, malas caras... Odio.
Y empiezo a sentir eso por mi mismo.

No estoy muerto.

Sí, parece que, después de todo, sigo vivo. Después de pasar meses perdido y sin rumbo, dando tumbos por Madrid (como dice aquella canción), buscando, desesperadamente, algo que pudiera ayudarme a seguir adelante... apareces.
Es gracioso porque, cuando ya lo daba todo por perdido, cuando pensaba que, no importaba lo perfecto que alguien me pudiese resultar, siempre iba a encontrar algo que no me gustase... apareciste en el horizonte, como un faro que me guiaba a la orilla de mis sentimientos. He dejado de naufragar.
Vuelvo a encontrarme en esa angustiosa, pero maravillosa, situación de no saber qué va a pasar después; bueno, ni después ni nunca, pero no me asusta. Sinceramente, no creo que te des cuenta nunca de lo que puedes llegar a significar para mí, no creo que sepas nunca que esta entrada está inspirada en ti... En tu sonrisa, en tus ojos, en tu pelo... No creo que sepas, jamás, que has conseguido que pueda volver a tener ilusión por algo, que sonrío con solo acordarme de ti...
Nunca fui de esos que se conformaban con poco, pero es que ahora la palabra "poco" es tan relativa... Puede que nunca llegue a acunarte en mis brazos mientras duermas, puede que nunca saboree tus labios, que nunca me pierda en tu olor, en tus sábanas, en tu cuerpo, en tu corazón... Pero ya no estoy perdido en mí mismo.
Hoy puedo decir que soy feliz. Si, no sé si mi futuro y el tuyo llegarán a pasear de la mano como la hacemos los dos en mis sueños, pero vuelvo a sentir, vuelvo a sonreír... Y te doy las gracias de corazón porque, aunque esto no llegue a ninguna parte, has dejado tu huella grabada en mi interior.
Cojo bocanadas de aire gélido sin miedo a enfermarme, voy corriendo por la calle sin miedo a tropezarme, camino con la cabeza bien alta sin complejos que me amarguen, río hasta quedarme sin aliento... Vuelvo a estar vivo. Vuelvo a acordarme de ti. Vuelvo a sonreír.
Vuelvo a creer en imposibles. Vuelvo a creer en el amor.

¿Am? o ¿R?

Qué difícil es hablar de algo tan universal sin dejar que lo que dices no quede reducido a las típicas obviedades y a conclusiones sin sentido, pero... ¿realmente tiene el amor sentido? Qué difícil se hace también llamarlo por su nombre, quizás la propia palabra abarque demasiadas emociones como para poder mencionarla sin que nos tiemblen las rodillas. Al fin y al cabo, somos humanos... aunque a veces algunos se propongan demostrar lo contrario.
Vivo en un piso donde, a parte de mi, viven otras dos personas, ambas con pareja. Una de ellas no para de discutir, si no es por que uno ha puesto un canal en la televisión que al otro no le apetece ver, es por que si uno friega el otro tiene que cocinar, y no siempre le apetece a alguno. La otra, parece que no salen de una para meterse en otra. Me explico, viven en un remolino constante de discusiones. La mayor parte son tonterías, por no decir que todas lo son en su totalidad, pero la verdad es que cada día parece que la cuerda se tensa más y más... ¿se romperá pronto? Supongo que ambos se preguntarán lo mismo que yo, aunque la respuesta está en intentar solucionarlo.
Después tengo a esta amiga de toda la vida que, sin dar un duro por el amor, ha sido sorprendida por esta, aparentemente increíble persona (y digo "aparentemente" porque aún no he tenido la ocasión de conocerla). La mala noticia esta por venir, recuerda que vives en el mundo real. Esta persona que le ha cambiado todos los esquemas a mi amiga se ha ido al extrajero a estudiar. Sin embargo, intentan seguir adelante con sus sentimientos intentando superar el claro obstáculo de la distancia... ¿Lo conseguirán?
Justo hace escasa media hora, un curioso amigo mío me ha contado que la persona por la que prácticamente vive todos los días y que está estudiando fuera le acaba de decir que prefiere que sean amigos. Esto después de que, un par de semanas antes de que se marchara, decidieran seguir adelante con lo que tenían, y antes, también, de que mi curioso amigo vendiera su teléfono móvil para, así, comprarse un pasaje para ir a visitar a la que era su pareja.
Para terminar, y no aburrir con historias inconexas sobre mi círculo de amistades, están mis amigos de la facultad. Estos, como yo mismo, están solteros y sin compromiso. No tienen discusiones con nadie, no se gastan dinero por nadie y viven para estar agusto con ellos mismos sin necesidad de tener que satisfacer los deseos o la voluntad de alguien que, supuestamente, es importante en sus vidas.
Resumiendo... Mis compañeros de piso A y B (respectivamente).

A vive por y para la discusión, muchas veces lastima a su pareja, igual que su pareja lo lastima a él. El drama forma parte de su vida cotidiana y creo que no sobrevivirían ni un solo día si no pudiesen echarse en cara todas esas cosas ridículas.
Sea lo difícil de creer que sea... se quieren. Y eso se nota en su silencio, en sus miradas, en la forma en la que vienen corriendo a quien alcancen primero cuando lloran desesperadamente porque se sienten mal por algo que le ha hecho al otro o que el otro le ha hecho a él.
Sueña con discutir toda la vida con la misma persona.

B se desvive porque su relación salga adelante. Sinceramente, B es una de las mejores personas que conozco, y es difícil creer que su pareja, débase a lo que se deba, sea tan compulsivamente celosa. Sí, el famoso tema de los celos también está presente en la vida de mi compañero de piso.
Se puede decir que llevan un mes discutiendo reacciones, actitudes, comportamientos... de B. B para defenderse de las acusaciones que su pareja hace sobre él, y su pareja para demostrar algo que, en realidad no quiere que sea cierto. Lo gracioso está en preguntarse ¿por qué se esmera tanto B en demostrar que lo que su pareja intenta también demostrar es mentira? ¿por qué su pareja sigue con B si parece ser que cualquier actitud que B tenga es motivo de infidelidad?
...quizá también se quieran, quizá no...
Sueña con que su aparente pesadilla se convierta en una historia de amor.

Mi amiga de toda la vida.
Esta amiga mía se sentirá afortunada a la vez que desdichada. ¿Cómo es posible que algo que te has pasado toda tu vida negando llegue a ti, y tenga que marcharse de esa manera? A pesar de eso, ambas han decidido luchar por su relación, creen en ellas mismas, así que... ¿qué puede fallar? El tiempo lo dirá.
Distancia VS Amor... ¿habrá que llamar a un médico?
Sueña todas las noches con la misma persona.

Mi curioso amigo.
A pesar de ser más joven que yo (que tampoco es muy difícil), su mundo se basa en conseguir trabajo para poder mantenerse a si mismo. Entre estudiar y trabajar, eligió lo segundo, e inconscientemente, y aunque él no lo quiera reconocer del todo en muchas ocasiones, probablemente se arrepienta toda su vida... pero aún está a tiempo de cambiarlo.
Al tener una vida de adulto a una edad tan temprana... ¿qué mejor que alguien que te ayude a llevar la rutina de una forma más amena y llevadera? El problema es que no todo el mundo vive su misma situación y no todo el mundo busca lo mismo que él.
¿Amor? Le hubiese gustado, pero ahora solo le queda un pasaje de avión con destino "amistad con mi ex". ¡Ah! ... y sin teléfono móvil.
Sueña con alguien que pueda entenderle de la misma forma que él entiende a los demás.

Todos los demás.
¿Qué buscan? ¿Qué sienten? ¿Que les ha llevado a estar así? (Así = solteros) ¿Será por voluntad propia o porque, intenten lo que intenten, no consiguen encontrar a su media naranja?
Probablemente tengan su historia, y cada situación que cada uno de ellos halla vivido les ha llevado a su situación actual. Sin embargo, como todos los anteriores, seguro que también intentan llegar a ese sentimiento tan universal del que hablaba al principio de esta entrada. Caminarán sin rumbo y la fe les fallará en incontables ocasiones, pero ¿cuál es el camino al amor?
Ellos sueñan con encontrarlo.

En cuanto a mí, puedo decir que intento que alguien me sorprenda, que alguien, derrepente, se choque conmigo y se enamore de algo que pueda resultarle atractivo al ver mi cara aturdida y asustada. Sí, sé que estamos en la vida real, pero yo, al igual que todo mi círculo de amistades, también sueño.
Prometí que no iba a volver a hablar de esa persona y no lo haré, pero... a pesar de una experiencia un tanto agridulce, sueño con tus labios en cada despertar, con tu perfume impregnado en cada rincón de mi habitación, con tu belleza única, con tus tontos pero increíbles detalles cada vez que nos veamos, con tus ojos fijados en mi cara mientras duermo... sueño contigo, si.
Pero... ¿quién eres? ¿dónde estás? ¿qué haces en estos momentos?
Considerenlo ingenuidad, musarañerías, imposibles... pero sigo esperando ese encuentro, y algo me dice que lo mejor está por venir.

La última canción...

Es la última vez que hablo de ti, la última vez que te haré sentir que me importas más de lo que deberías importarme... Así que espero que lo disfrutes, porque se acabó.
Has tenido tiempo de pensar, de volver, de darte cuenta de que, como yo, nunca más te querrá nadie, de reflexionar... Pero, precisamente reflexionando, he llegado a úna conclusión, que supongo que será la misma a la que tu habías llegado hacía muchísimo más tiempo que yo: no significo nada para ti.
Así vas por la vida, te dedidas a engatusar con tus innumerables virtudes a los que son lo suficientemente ingenuos como para no darse cuenta de tus también innumerables defectos, y de tu obvia incapacidad de llegar a sentir nada por nadie.
En un calendario imposible llegamos a jugar entre sábanas ya desgastadas de todo tu falso amor, de toda esa hermosa palabrería barata con la que tan bien sabes jugar. ¿De verdad eres capaz de querer a tantas personas a la vez? Y... si tanto me querías, ¿por qué dejabas que me perdiera en ti, que me arrastrara de tal manera, cuando sabías perfectamente lo que significabas para mi? Aunque, claro, culparte solo a ti sería demasiado víctima por mi parte, y te daría más mérito del que mereces. Nunca me perdonaré haberte creído todas las veces que lo hice, incluso cuando ya era imposible. Nunca olvidaré la última vez que lo hice.
¿Lo peor? Que te he querido como a nadie, pero no sabes la indiferencia que has conseguido que ahora sienta por ti. Probablemente nadie crea que sea indiferencia lo que siento después de escribir todo esto, pero es una manera de sacar para afuera todo lo que tenía que haber dicho en su momento y nunca dije porque pensaba que realmente me querías.
Llevo casi 4 meses acordáncome de ti cada segundo, cada minuto, guardando tus recuerdos, las cosas que alguna vez me unieron a ti... ¿Para qué? Hoy mismo me he deshecho de todo lo que guardaba de ti, ha ido a la basura; como irá también todo lo que un día sentí. Aunque, seré sincero, nunca podré borrar tu recuerdo. Fuiste y siempre serás el primer amor de mi vida, pero me has demostrado que todo lo que decías que yo te importaba no era más que otro juego de palabaras más.
En mi corazón ya no llevo amor, llevo una caja de promesas rotas, un ramo de flores que nunca recibí, aviones que nunca cogimos... cosas que dijiste y nunca sentiste. Demasiada decepción llevo dentro de mi para poder verte como alguien que merece la pena, como alguien que realmente se preocupaba por mi tanto como decía.
Si la mentira fuese bebida, la beberías y escupirías como si de agua se tratase. Si el engaño fuese el más bello poema, lo escribirías sin problema. Si el amor y la verdadera amistad fuesen algo por lo que tuvieras que sacrificarte... vivirías toda la eternidad.
Rumbo perdido, mirada torcida, sueños difusos... metas claras. Y tú ya no perteneces a ellas. Y, espero, que si algo de vergüenza te queda, no me le eches nunca en cara, ¿sabes por qué? Porque soy demasiado para ti, soy más de lo que te mereces, más de lo que nunca volverás a tener (si es que te pertenecí alguna vez).
Y, tristemente, así es como termino mi canción, así es como te digo adiós... PARA SIEMPRE.

Personas

La verdad es que sigo sin sacar nada en claro. Todos los días, desde que me despierto hasta que me acuesto, y a veces hasta soñando, le doy vueltas a las mismas cosas, analizo la misma situación, reflexiono, y no doy respuesta a mis preguntas. Supongo que no todo tiene una respuesta lógica, y ahí es cuando debemos dejar al corazón mandar.
Ilógicas son también las personas que pasan por nuestra vida, al igual que el papel que en ella desempeñan. Hay personas que conoces un día y jamás vuelves a ver, personas con las que no mantienes contacto visual, pero con las que mantienes largas conversaciones todos los días, personas que están ahí para los buenos momentos, personas que están ahí para los malos momentos, personas que te engañan, que te hieren, que te quieren, que te olvidan...
Sin embargo, no está en nuestro poder elegir cuáles de esas personas formaran parte de nuestra vida hasta el día de nuestra muerte, es algo que la propia vida, los momentos vividos, las situaciones experimentadas, nuestro corazón... deciden.
Por un motivo u otro, mi vida, mi corazón... ha decidido que no te olvide a ti. Probablemente te dé más importancia de la que te mereces, te necesite más que tú a mi, piense en ti como tú nunca has pensado en nadie, te ame más de lo que nadie te amará jamás... Pero así es la vida, y así soy yo: entregado, impulsivo, indeciso, valiente, cobarde, fuerte, frágil...
En definitiva, hay personas que, aunque no quieras, formaran parte de tú vida, de tus recuerdos... Personas que sabes que estarán ahí siempre de una manera u otra, personas de las que mañan ni te acordarás, por las que mañana derramarás una lágrima, personas que te sacarán la más sincera de las sonrisas, personas que te quieren, personas que te amen con todo su corazón...
Persona imborrable, esa es la persona que eres tú. Persona por la que volvería a cometer mil y un errores más, persona por la que daría mi vida, pues sin ella, la mía no tiene sentido.

Gente, estrés, humo, coches, contaminación... eso es todo lo que queda después de un año de experiencia.

Luces, esplendor, grandeza, oportunidades, libertad... eso es todo lo que esperaba encontrar.

Sigo sin entender porque tenemos esa manía tan horrible de hacernos ideas preconcebidas, de tener expectativas. Es tan fácil que te las derriben...

La gran ciudad me esperaba, y aunque nunca pensé que llegaría nadie, lo cierto es que llegaste tú. Cometí el error más grande de mi vida, no por estar contigo, sino por dejarme absorber por ti. Creo que por fin soy capaz de entender por qué la gente llega a sufrir por amor, o por qué la gente hace cosas que no quiere por amor... quizás nunca antes lo había sentido.

Sin apenas vida social en Madrid, y acabado de llegar... apareciste. Como un rallo de sol en el cielo en un dia encapotado. Me deje arrastrar a tus hábitos, a tus amigos, a tu vida... sin tan siquiera tener yo una propia. La tenía en Las Palmas, pero aquí no.

Cuando me di cuenta, todos tenían sus grupos, todos tenían sus amigos, todos habían parecido encajar en alguna parte. Todavía, a día de hoy, sigo encontrando ese hueco en el puzzle en el que mi ficha pueda encajar...

Ya no estás tú, ya no me queda nada... Quizás por eso te echo tanto de menos, porque eras lo único real que tenía. Y, si no es así, prefiero pensar que sí lo es, prefiero pensar que no es que esté loca y totalmente enamorado de ti, sino que simplemente necesito volver a mi entorno.

...y que tus repentinos romances dejen de causarme quebraderos de cabeza

...y poder reirme a carcajadas y olvidarme, aunque sea por una hora, de lo agusto que estaría contigo

Porque, ahora, los días grises ya no ocultan rallos de luz, solo traen lluvia. Y, aunque me gustaría estar cobijado bajo tu techo, la vida nos ha hecho ver que no es así como debe ser. ¿Por qué nos acostumbramos tan rápido a lo bueno?

El año que viene... el año que viene... el año que viene aún no ha llegado y, como un iluso, sigo teniendo espectativas de lo que puede o no puede ocurrir, de lo que quiero y no quiero que ocurra... Malditas expectativas...

Lo que no te mata, te hace más fuerte. Y si hay algo de lo que estoy convencido es que, gracias a estos 8 meses y medio, soy más fuerte.

Gran Canaria... allá vamos.

Madrid... espérate, y verás.

"Pese a mi certeza de que la juventud ahora es mil veces mejor a cualquier generación anterior, me preocupa un minimísimo sector que los alarmistas y políticamente correctos medios de comunicación excluyen una y otra vez. Los gays Ninis: Los jóvenes maricas de hoy no son como los de antaño: hordas de niñatos toman las calles, las pistas de baile y las tiendas modernas, enfundados en unos pitillos arrugados (¿Hay cosa más fea?) y con una viril e inservible barba... Caminan por la vida sabiéndose triunfadores cuando aun no han empezado a vivir. Se creen estilosos por la endeble razón de su orientación sexual; destrozan la lengua y la cultura española, presumiendo de ignorancia en cada cosa que hacen... No luchan: entienden que el mundo es un lugar a su medida y que el viaje de su localidad a la capital es el pasaporte suficiente para una profesión liberal, un sueldo generoso y un montón de penes millonarios que irán detrás de ellos... Me pregunto qué ocurrirá cuando despierten del sueño."

...yo también me lo pregunto.

Desaparecer...

Desaparecer en la inmensidad del océano. Nadar hacia ninguna parte, sin rumbo alguno, sin nada en la mente.

Expectativas, ilusiones, sueños... Está bien tenerlos, supongo, pero qué mal se siente uno cuando alguien tiene el poder de derrumbarlos todos abajo. Qué sensación de impotencia tan grande se siente cuando te decepcionan, cuando ves que, mientras tu entregabas cuerpo y alma, los demás se reían de ti.

Lo peor, sin duda, los recuerdos... En un futuro probablemente serán muy entrañables pero, ahora, me matan. Me mata cada lugar en el que estuvimos y no estaremos más, me matan las canciones que escuchábamos, me matan los nombres, los olores, las calles... todo.

Quién fuera medusa...

Black roses and a bottle of wine...

...those were the only things that I left behind. Keep searching but it's so hard to find. All you have are the tears that you cried, black roses and wine.